Ciudad de México. – La sesión en el Senado de la República se vio interrumpida este martes por un enfrentamiento físico entre el dirigente nacional del PRI, Alejandro “Alito” Moreno, y el legislador Gerardo Fernández Noroña. Lo que inició como un intercambio de señalamientos subió de tono hasta convertirse en empujones y jaloneos que obligaron a detener momentáneamente los trabajos legislativos.
El incidente ocurrió en medio de un debate marcado por acusaciones mutuas. Testigos relatan que los reclamos verbales pasaron rápidamente a los roces físicos, lo que provocó la intervención de otros senadores y del personal de resguardo para evitar que la situación escalara.
Aunque no hubo lesionados, las imágenes del altercado circularon en redes sociales y generaron una oleada de comentarios sobre la creciente polarización dentro del Congreso. Desde distintas bancadas se llamó a la calma y al respeto entre legisladores, subrayando la necesidad de que los debates se mantengan en el plano político y no en el físico.
La Mesa Directiva del Senado exhortó a todos los grupos parlamentarios a continuar los trabajos con civilidad y reiteró que este tipo de conductas dañan la imagen del Poder Legislativo.
El incidente pone nuevamente en el centro de la discusión el nivel de confrontación política en México, donde las tensiones electorales se han trasladado a los espacios legislativo.
Por Enzo Guzmán